"El enigma del cuervo".

El eterno pesimista.

ANTE TODO: No leer si se piensa ir esa misma tarde al cine porque está cargado de esa cosa que llaman "spoliers", para que todos nos entendamos: que os voy a destripar la película porque me apetece. Y sin más dilación....
Bueno, esto, como se puede sospechar, es una reseña cinematográfica, y quiero hacer gala de que no es de esa película, recientemente estrenada, que está causando furor entre el populacho adolescente al que tengo el amargo y dudable placer de pertenecer. "Tengo ganas de ti". Pues yo no, así que no quiero ni oir hablar de el film. Cuestión de ideas.
Vengo a comentaros la película que acaban de estrenar, sin tanta suerte como la anteriormente mencionada, "El enigma del cuervo". Creo recordar que era de producción española, o algo español, porque en el cine estaba indicada con la bandera de este pequeño terreno que es nuestro país, aunque igual lo pusieron por animar a La Roja...quién sabe.
El caso es que el día de autos en cuestión yo iba al cine con una amiga, y tiramos a suerte en el último momento la película...tocó esta. Yo había visto que era más o menos de miedo, pero un miedo gastrointestinal, ¿sabéis, no?. Sí, de esas que es todo sangre,  órganos gelatinosos y otros tipos de glándulas viscosas sin identificar. Nos aprovisionamos con una buena carga de palomitas y Coca-Cola, y nos metimos en la sala....que sorpresa, estuvimos solas toda la película. De la tensión aguantada, nos comimos 6€ de palomitas en los anuncios....

  El tema central era una reconstrucción  (inventada, claro) de los últimos días de Poe, el colega Edgar Allan Poe. Bueno, ya tengo hecho un post comentando una de sus novelas y trazando una nunca trazada biografía suya, el que quiera verlo, que tenga ni bondad de clicar aquí. Los demás, queridos/as lectores/as digo yo que le conoceréis, sino, buscad en Wikipedia. La trama iba de que un asesino psicópata empezaba a asesinar a personas inocentes siguiendo los relatos de Poe. Mientras, el autor, que  acaba de volver a Baltimore (USA) sin un duro y con graves problemas con el alcohol, intentando convencer al padre de su amada para que le concediera su mano. El inspector Fields empieza a relacionar los casos con Poe, hasta sospechar de él. Cuando se le interroga se levanta todo tipo de sospecha, la cual es sustituida por un bastante agobiante sentimiento de miedo. El misterioso asesino secuestra a la novia de Poe, y reta al escritor a un juego de lo más siniestro: va a seguir asesinando según sus relatos, pero añadirá nuevos toques que le indiquen cual será el próximo crimen. Poe debe deducir cada pista y plasmar los acontecimientos del día en un estremecedor relato que se publicará cada mañana en el "Baltimore Patriot". Los crímenes le conducirán al paradero de su amada, que permanece sepultada viva (¡Qué claustrofobia!). Las famosas deducciones que esperábamos de Poe me decepcionaron considerablemente, porque el autor se dejaba llevar más por el miedo y la auto-culpabilidad que por un dramatismo frío y lleno de raciocinio, como se supone que es su detective, Auguste Dupin, protagonista de algunos de los casos que se representan. Finalmente, el maquiavélico asesino psicópata con una obsesión por los relatos de Poe, resulta ser su humilde tipógrafo en el periódico ante mencionado. Ya ves, yo me esperaba algo tipo Moriarty para Holmes...Poe acepta tomar un veneno a cambio de que el asesino le deje liberar a su prometida, que resulta estar en las catacumbas de la redacción. El escritor consigue salvarla, pero el veneno le va haciendo mella. Aparece moribundo (esto ya realidad) en un banco (de sentarse) público. Como última acción, consigue mandar un recadero al inspector Fields, con las señas del asesino, que ha huido a Francia. Justo cuando el inspector le tiende una emboscada y le amenaza con una pistola, y a la vez el asesino se abalanza sobre el inspector, justo en ese momento, se acaba la película y empieza a sonar una música medio pop, medio electrónica y unos créditos modernos que no pegan ni con cola. Total, que el final fue lo más decepcionante junto con las dosis de deducciones que esperaba. Por lo demás, bastante bien, tampoco distorsionaron mucho a Poe, sigue manteniendo esa nube negra encima de la cabeza, aunque personalmente debería de tener más cara de niño pequeño. Juzgad vosotros mismos, queridos/as lectores/as.

Le pongo un 7 raspadillo. Y solo por aprecio a los relatos de Poe. Esto me recuerda a un relato que escribí yo hace ya un tiempo, después de leer la poesí de Poe, "El cuervo". Creo que me quedó bastante bien como parodia a Poe (si hay algo que me gusta hacer es parodiar) y su poesía, así que aprovechando que nunca os lo he puesto entero, lo publicaré en 3 partes en los próximos posts. ¡¡Estad atentos!! By Carmen :D.